domingo, 3 de enero de 2010

JUAN D'ARIENZO EN SU CENTENARIO



(publicado el 14/12/00)

EL REY DEL COMPÁS.



Hace 100 años nacía en un día como hoy, del año 1900, en la barriada porteña de Balvanera, un pibe que será el gran impulsor del Tango: JUAN D'ARIENZO. Con vigencia en varias generaciones, que lo emularon en lo musical e impulsó el género, desde la voz a los pies. Como una extraña parábola, pero muy real a la vez.
Haciendo bailar a legiones incontables de rioplatenses y logró en presentaciones en vivo, congregar a multitudes que -a veces- no lograban presenciar su actuación en bailes o emisoras radiales.
Desbordaban su capacidad, por caso Radio El Mundo, sus estudios de Maipú 555, que para transmitir Ronda de Ases, arredanba el Teatro Casino, de Maipú 369, que también era insuficiente. Todo para escuchar a NUESTRO DIRECTOR, junto Fresedo, D'Agostino, Tanturi, Troilo. Época que el Tango, era pasión de multitudes y D'ARIENZO con su impronta de "Toscanini porteño", generó tal fenómeno de captación de público.
Todavía no existían los "camelos" de las grabadoras, fabricando discos de diversos metales y/o diamantes. EL REY marcó varios récords en placas de 78 R.p.m, por caso: La Cumparsita y en su reverso La Puñalada, sin omitir que si no hubiesen quemado los archivos de la Victor, aduciendo falta de espacio, cometiendo -de paso- uno de los más aberrantes saqueos a la Cultura Nacional. Dado que en esos anaqueles estaban las matrices de las principales figuras del Tango, de varias décadas; la orden venía marchando y no eran "los santos" precisamente.
Nuestros "Tutores del Norte", en sus inaugúrales stand-by, en letras pequeñas, apuntaban al Tango para invadirnos y desembarcar con gritos y aullidos, ampliados por la cobertura local, burda y hueca de El Club del Clan y otros importados, pero es para aplicar el título tanguero de "Pa' que Seguir"... Fueron sucesos sueltos, que significaron la avanzada, de un planeado emprendimiento, para pensar ???. No es cierto amigo lector, ahora que estamos sepultando el siglo, pleno de cambalaches y mentiras.
El fuego que consumió las matrices del disco, que se escuchó por doquier, en bailes, intervalos de funciones de cines barriales, corsos, calesitas y cualquier patio, donde muchos pibes todavía de cortos, tirábamos los primeros pasos, de esta música que pretendieron aniquilar, con argumento baladí... sin anestesia.
Pero seguimos en LA CIUDAD, para memorar al autor de Chirusa, Nada Más, Paciencia, El Vino Tristre, Ya lo Vés, No nos Veremos Nunca, Cartón Junao, etc., citando unas pocas obras de la autoría de nuestro personaje. Quien debutó precozmente a los doce años con su violín, junto a otro pibe pianista Ángel D'Agostino, en matines teatrales.
Siguió tocando en zarzuelas, jazz y tangos, integrando las orquestas de Aieta, con Mazzeo, Visca, Gorrese, Lacueva, etc, hasta su debut como director, en distintas etapas que se consolidan, recién en 1935.
La misma con el aporte de Rodolfo Biaggi, en el piano, con una definida orientación bailable de marcado y rígido compás, con stacattos y silencios, de frecuentes pasajes pianísticos de mano derecha, expresando la melodía con el contracanto del primer violín, en la cuarta cuerda.
Debutaron en la grabadora Victor, el 2 de julio de 1935, con Hotel Victoria y en su reverso, el vals Desde el Alma. La fundamental originalidad, contó con notables músicos que enriquecieron, el famoso "Estilo D'Arienzo", con pianistas como el ya citado, Juan Polito y Fulvio Salamanca, los bandoneones de Héctor Varela, Alessio, Lazzari, en las cuerdas Cayetano Puglisi, Mazzeo y Weber y las voces de Alberto Echague, Armando Laborde, Mauré, Bustos, Valdés, en apretada síntesis.
Conformó NUESTRO EVOCADO, el director total, que utilizó el repertorio Guarda Vieja y grabó casi en su totalidad la obra de Arolas, modalidad no muy frecuentada por otro colegas suyos. Más su propias creaciones con letras de Gorrindo, Romero, Cadícamo y Waiss. Falleció en la misma Reina del Plata que lo viera nacer, el 14 de enero de 1976.

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