martes, 13 de octubre de 2009

"LOS 90 AÑOS DE UN TALENTO"



(publicado el 21/10/92)

Entre las innumerables figuras nacidas en nuestro Avellaneda, que aportaron brillo y jerarquías con sus nombres y trayectorias, al deporte, las artes y las ciencias, queremos recordar a DON MANUEL ANDRÉS MEAÑOS. En la fecha se hubiera cumplido el 90 aniversario de su natalicio.
Despierta su vocación a los 13 años al ingresar al Nacional Rivadavia, donde egresa como Bachiller. Se desempeña como bancario y agente de seguros, pera estaba claro que ambos empleos no eran de su interés. Las letras y la noche le tiraban mucho.
En 1932 debuta con la obra teatral "La Rival de Greta Garbo", estrenada por Olinda Bozán y su compañía. Don ANDRÉS solía comentar en la intimidad: Mi primer trabajo serio, fue una obra cómica, siempre en el núcleo de amigos.
Nuevamente estrena y reitera el éxito anterior, con la primera actriz teatral citada: La Dama Púrpura. Previamente será entre 1934/7 el primer secretario de la casi flamante AFA. Ampliando sus ocupaciones será charlista y escritor en emisoras como París, Belgrano, Splendid y El Mundo. En 1940 dirige la Catedral de la Revista Porteña: el teatro Maipo y colabora con Enrique Discépolo, en la realización de un espectáculo, en el Teatro Casino, todo un éxito.
Al año siguiente será argumentista del cine en filmes como Fantasmas de Buenos Aires y Amor Último modelo. Su labor será motivo para ser elegido secretario en Argentores, en 1943 y por períodos sucesivos.
Su inventiva será casi centralizada en letras, para voces radiales como Pepe Arias, Tita Merello, Mario Fortuna, como El Ñato Desiderio donde éste popularizó: ...hay que garrar los libros, que no muerden".
Sus letras tangueras lograron amalgamar trascendencia y hondura, fueron musicalizadas por sus amigos Marcucci, Laurenz, Scorticatti, Mora, los Velich, etc. Son para citar que dos ellas La Reja y Porque Soy reo, las grabó Gardel.
Otras fueron notables como Mi Dolor, De Puro Guapo, Mentiras de Amor, Cansancio, Desesperanza, En la Sombras, Duda, etc. Con su barra nochera que integraban Luis Sierra, Irusta, Mora, Demare, Fidel Pintos fueron los testigos del flojo debut de Pichuco, en Marabú, en julio del 1937.
Hombre de la Academia a ultranza, frecuentador de Pueblo Unido y otras entidades . Lo sorprende la Huesuda el 20 de abril de 1959.
Este evocación que no pretende ser puntual, quiere recordar al Ilustre hijo de esta ribera del Riachuelo, con cariño admirativo por su obra extensa y jerarquizada en tantas disciplinas. Por eso entiendo que mejor que cerrar esta nota con su propia obra, en un fragmento de "Porque Soy Reo":.... "observando que la gente/ rinde culto a la mentira/ y el amor con se mira/al que goza de poder"......

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